Primero fue el PP, ahora IU. Se vuelve a hablar de nuestro desafortunado sistema electoral.
Un sistema que permite tener más representación a quienes tienen menos votos y favorece sobre todo la inestabilidad y la formación de bolsas minoritarias de privilegiados.
IU se queja con razón y el PSOE parece inclinarse a comprender la protesta de sus socios. Pura apariencia. Rodríguez Zapatero no moverá una coma de la Ley electoral que suponga la más leve molestia para los secesionistas que sostienen su Gobierno.
Martín Prieto escribe a propósito de nuestro sistema electoral:
“De 34 millones y medio de votantes sólo 544.513 han votado a ERC, con ocho diputados. Así Carod-Rovira no es el chocolate del loro, sino el loro mismo, parlando alto en Perpiñán o en La Moncloa.“Parafraseando a Churchill nunca en la historia de los conflictos humanos tan pocos le debieron tanto a tantos.Los apoyos de Rovira dan para un club de fútbol y no para tanto de lo que presume.
“El Bloque supera a su pariente catalán: sobre más de dos millones y medio de votos, ha obtenido en su circunscripción 313.953 votos; ha retrocedido respecto a la elección anterior pero obtiene una Vicepresidencia en la Xunta, tres consejerías y un planteamiento de salida: Galicia como nación (ese primer paso a la independencia) y el reconocimiento por el detestado Madrid de una deuda histórica de más de 21.000 millones de euros que nadie sabe de dónde sale ni cómo se mide ni cómo se paga.
“En el País Vasco Ibarretxe gobierna con menos del 50% de los votos y terroristas irredentos como los comunistas de las tierras vascas le tienen cogido por las narices con 150.644 votos, que son menos que los afiliados a Canal Plus. Juega más gente a la lotería de la que vota a los proetarras.” (Martín Prieto, La dictadura de las minorías)