El presidente regional vasco prosigue su gira internacional presentándose (él y su plan secesionista) bajo el aspecto de víctima perseguida, especialidad esta en la que los nacionalistas son maestros.
Ahora toca Estados Unidos, donde este defensor de la limpieza étnica lloriqueará en una universidad californiana. Algunos ciudadanos ya han empezado a reaccionar:
"Un grupo de residentes españoles en Silicon Valley (California), que incluye numerosos vascos y navarros, ha puesto en marcha una protesta contra la próxima visita de un notorio iluminado a la prestigiosa Universidad de Stanford: Juan José Ibarretxe. Se titula In defense of Stanford's integrity, against its manipulation by Ibarretxe.
"El turismo mundial del lehendakari es tan oneroso como inútil, aunque el hombre y su séquito se lo pasen en grande jugando a la Política Exterior. Nos cuesta una pasta a los contribuyentes vascos –y a los españoles, gracias al cupo- que alcaldes, gobernadores, parlamentos y rectores de esos mundos de dios accedan a sacarse una foto con el Moisés de Ajuria-enea y le dediquen una palabra amable, incluso alguna condecoración.
"Pero, además, las absurdas, demenciales y tergiversadoras explicaciones de Ibarretxe sobre el “conflicto vasco” no sólo burlan la verdad y dañan la imagen de España por esos mundos, sino que además hieren a las víctimas de ETA y son una afrenta adicional a quienes soportamos su nacionalismo obligatorio en los predios vascos (y encima pagamos sus viajes sinsentido y los de su séquito). Hay que animarse: firma aquí la petición –hay versión en inglés y castellano- para que Ibarretxe no sea recibido en Stanford, un sitio serio que corre el peligro de dejar de serlo (y pásalo)."