Este mediodía he visto a varios circunspectos presentadores (y presentadoras) de telediarios insinuando que el “grupo ultraderechista Tea Party” está detrás de varios asesinatos en Estados Unidos.
En consecuencia esos mismos medios suelen considerar que hay una manera de quitar la vida propia de la derecha y otra de la izquierda. Por ejemplo, el terrorismo que practica el nacionalismo vasco, o el aborto, o el genocidio religioso, serían formas de matar de izquierdas (y por lo tanto menos condenables) Disparar contra una demócrata norteamericana sería una forma de matar de derechas. En consecuencia, la peor de todas.
Podríamos caer en la trampa. Podríamos dejarnos llevar por una concepción burda, superficial y profundamente inmoral de la Historia y concluir que en España el terrorismo siempre ha llevado las siglas de la izquierda. Pero eso supondría caer en la misma obscenidad que los presentadores (y presentadoras) de telediarios que, entre sonrisa y sonrisa, reparten licencias para matar.