Hemos echado a Zapatero a patadas. ¡Por fin! Es la mejor noticia de la noche. Otras son bastante malas.
El legado del destructor:
- Zapatero pasa a la historia como el peor presidente de España y también como el peor secretario general del PSOE.
- Derrota nacional. Derrotas regionales. El PSOE no tiene a qué agarrarse.
- Los dirigentes del PSOE vuelven a mostrar su carácter cobarde y calculador: desaparecieron desde que empezó el recuento electoral. Rubalcaba compareció completamente solo. Patético.
- Rubalcaba anunció un congreso pero... ordinario: la derrotada cúpula socialista quiere controlar su propia voladura pero es más que dudoso que lo consigan. No tardarán en aparecer los Bonos.
- Derrota clamorosa del nacionalismo socialista: el PSC pierde 11 escaños y el PSE, 5. Se acabó la complicidad con el etnicismo, si es que quieren sobrevivir.
Y algunos daños colaterales de la magnífica noche electoral:
- Llegan al Congreso los iletrados, los totalitarios, los terroristas y los antisistema: IU, Compromis, ETA, nacionalistas. Poco representativos, pero ahí están. Mala noticia.
- Nuestra ley electoral es pestilente: Amaiur fue votada por 328.787 votos y obtuvo 7 escaños; UPyD 1.087.091 votos y 5 escaños; CiU 963.704 votos y 16 escaños.
- Rajoy pronunció un buen discurso en Génova. No en vano es el mejor parlamentario actual. ¿Pero qué va a hacer a partir de mañana? Los silencios del líder del PP ya no son aceptables: hoy es ya presidente de España.
- Y la terrible realidad: hay todavía 6.890.839 ciudadanos capaces de votar socialista. Y otros 2.273.473 votan nacionalista (de ellos, 333.592 votos a etarras).
