Tomás Luis de Victoria es a la música lo que San Juan de la Cruz a la literatura. Ambos nacieron en la misma ciudad, con apenas 10 años de diferencia, y sus obras son la mejor expresión de la fe y la religiosidad que ha dado nunca España.
Y no se me ocurre mejor forma de ilustrar el día de la Inmaculada, la gran silenciosa, la gran observadora, que la música de Victoria y la letra de San Juan de la Cruz:
"Una palabra habló el Padre, que fue su Hijo, y ésta habla siempre en eterno silencio, y en silencio ha de ser oída del alma".
Se ha celebrado este año el IV centenario del fallecimiento de Tomás Luis de Victoria, que como suele ser habitual, está pasando completamente desapercibido. Al fin y al cabo es música "clásica" y el tal Tomás no fue ni político, ni progre, ni nacionalista y encima dedicó toda su obra a alabar a Dios.
Algunos dicen que es el mejor músico que ha habido en España, pero a la vista de semejante currículo, ¡a saber si realmente existió!
Esta es la letra de su motete Vidi speciosam:
Vidi, speciosam
sicut columbam, ascendentem
desuper rivos aquarum,
cuius inaestimabilis odor erat
nimis in vestimentis eius,
Et sicut dies verni
Circumdabant eam
flores rosarum
et illia convallium.
Quae est ista,
quae ascendit per desertum
sicut virgula fumi
ex aromatibus
myrrhae et thuris?
Et sicut dies verni
Circumdabant eam
flores rosarum
et lilia convallium.
La he visto, hermosa
como una paloma, subiendo
los arroyos de agua.
La fragancia de sus vestidos
era inconmensurable.
Y como los días de primavera,
la rodeaban
las flores de los rosales
y los lirios de los valles.
¿Quién es ésta,
que sube por el desierto
cual columna de humo
que exhala olor
de mirra y de incienso?
Y como los días de primavera,
la rodeaban
las flores de los rosales
y los lirios de los valles.
Amplia información de Tomás Luis de Victoria con motivo del IV centenario de su muerte aquí.
San Juan de la Cruz en la Biblioteca virtual Miguel de Cervantes.
Carta apostólica de Juan Pablo II Maestro en la fe, dedicada a San Juan de la Cruz.
Y otra versión de la misma pieza, esta de la mano de la Capella Reial y Jordi Savall: